VARROASIS – VARROA DESTRUCTOR

VARROASIS – VARROA DESTRUCTOR

El mayor problema que se encuentran nuestras colmenas hoy en día es este parasito externo llamado Varroa destructor, se alimenta de la hemolinfa provocando un debilitamiento de las abejas, tanto en crías como adultos, y facilitando la aparición de enfermedades o entrada de virus.

El ciclo reproductor de la Varroa se lleva a cabo dentro de la colmena, la hembra pone sus huevos en el interior de las celdas de obrera y zángano, teniendo preferencia por estas últimas. La esperanza de vida de un ácaro de Varroa puede variar desde 25 días (en presencia de cría) hasta un máximo de 5 meses (en ausencia de cría).

La fase reproductiva comienza cuando, una o más hembras adultas grávidas, se introducen en una celda de cría con larva justo antes de ser operculada. Allí se quedan debajo del alimento larval hasta que la celdilla es sellada. En un periodo de 60 horas después del proceso de operculado de la celda, el ácaro deposita su primer huevo, del que sale un macho, a partir de entonces pondrá un huevo cada 30 horas de los que nacerán sólo hembras. La larva de Varroa resultante comienza a desarrollarse pasando por los estadios de protoninfa, deutoninfa y finalmente a adulto. Una vez alcanzado el estado de adulto, el macho y las hembras se aparean dentro de las celdillas.

El contagio de Varroa se produce por contacto directo con el ácaro, bien sea por pillaje, por intercambiar cuadros entre colmenas, entrada de zánganos infectados… Hay que ser muy cuidadoso u observador a la hora de comprar enjambres para evitar introducir en nuestro colmenar colonias que pudieran venir con un alto índice de parásito.

La mayor parte de Varroa que posee la colonia se encuentra dentro de las celdillas, este tipo de Varroa se conoce como reproductiva y la que se encuentra sobre las abejas, en menor cantidad, se conoce como forética.

Cuando un apicultor detecta Varroa sobre las abejas, la infestación del parasito se encuentra en un estado muy avanzado. Se debe poner solución inmediata para evitar perder un elevado número de colonias.

Un apicultor experimentado debe de saber reconocer los signos de infestación de Varroa en su explotación, así como efectuar métodos de control. A día de hoy no tenemos ningún método que acabe 100% con Varroa por lo que esta parte resulta fundamental e imprescindible.